jueves, 29 de septiembre de 2011

Vaya paliza llevo en el cuerpo.

Mañana llego a Talavera.
El paisaje se empieza a parecer a una peli de Tim Burton. Las ramas de los árboles muertos parece que me quieren agarrar. Pero yo siempre me escapo golpeándolas con mi pala.
Estoy empezando a pensar que lo que yo creía que eran miles y miles y millones de patos en realidad no son tantos, sino que son siempre los mismos que se van moviendo conmigo a medida que les voy espantando. Porque siempre salen espantados río abajo.  No sé qué pensar.
Buenas noches.

Hacia poniente.



Uy qué miedo.


Kayakman

Al ataque

Otro salto

El antepenúltimo

Un par de horas en Malpica de Tajo. O tres

Para avituallamientos varios, comer, cargar la batería para el móvil (el cargador solar ha salido rana), agua, víveres, cash, un rato en internet del  locutorio. Un  poco de turismo.
He escondido la piragüa entre unos juncos junto al castillo. No me han visto los centinelas.
No creo que llegue hoy a Talavera. Pues mañana.
Sigo animado y extasiado.
El ejercício físico mantenido está haciendo estragos en mi mente. Estoy cerca de convertirme en parte del río. Lo único que se me ocurre decir es CUA CUA.

No os preocupéis que se me pasará pronto.

Malpica de Tajo

A del castillo

Otra barcaza tirada por cable para cruzar el tajo

Y ya van dos